El oro siempre ha sido el metal preciado y codiciado por excelencia, y lo que en su día se llamó la fiebre del oro parece que ha vuelto a los mercados de valores y la gente está como loca comprando oro en lugar de hacer otras inversiones.
El oro es un material limitado, por eso es tan preciado, y es normal por lo tanto, que su valor suba. Por esta razón estamos viendo de un tiempo a esta parte como cada vez hay más joyerías y tiendas especializadas en comprar oro. Seguro que en nuestra ciudad hemos visto alguna tienda de “Compro oro”.
Todos podemos beneficiarnos del oro, quizá podamos comprarlo mediante joyas o comprando lingotes, el problema es: ¿Dónde lo guardamos? Quizá podría ser en el banco, sobre todo por el miedo a que nos roben.
Si no queremos comprarlo directamente, otra opción sería enterarse de cuales son las empresas extractoras de oro y comprar acciones de esa empresas. O incluso hay cuentas de ahorro en los bancos, aunque esto es algo nuevo y quizá pocos lo conozcan, que están unidos al precio del oro y tal vez esta sea la manera más fácil de invertir en este metal precioso.
¿Los riesgos? Todo en esta vida tiene riesgos, quizá a largo plazo sea la manera en la que podamos sacarle mayor rentabilidad.