Gracias al uso de las tarjetas de crédito es posible comprar cosas desde casa sin necesidad de tener que desplazarse. A uno le llega cómodamente el artículo que ha comprado por mensajería y a la empresa que lo vende se le garantiza una seguridad al haber cobrado de antemano por ello sin tener que esperar el pago contrareembolso, como se hacía cuando estas tarjetas no se encontraban disponibles.
Claro está, el uso de las tarjetas de crédito no ha eliminado el que algunas personas prefieran pagar cuando reciben el producto en casa, de modo que ambas formas de pago cohabitan cuando se trata de compras y ventas a distancia, como pueden ser por catálogo o a través de Internet, en el cual además de estas dos modalidades se están creando nuevas formas de pago como los monederos electrónicos en los que es posible acumular saldo y no tener que dar ningún dato bancario para hacer efectivos los pagos en las tiendas en línea en las que se acepta este modo de pago.
La tendencia indica que las compras a distancia seguirán en aumento hasta convertirse en la primera forma de comprar en detrimento de los comercios tradicionales, por lo que estas tiendas harán bien en ofrecer un sistema de venta online para sus futuros clientes si quieren mantener su negocio a flote.